Habiéndose pasado en gran cuantía incontables plazos de prescripción, nunca es tarde para volver a poner encima de la mesa 24 años después, el mayor bulo de la historia sobre políticos y jueces presuntamente violadores, el caso “Bar España”
La elegida para poner la guinda al dilatado caso, es la juez Sofía Díaz García, la cual sentará al banquillo a los 11 acusados por diversas injurias y calumnias (delitos contra la integridad moral), es decir difusión pública durante años de acusaciones muy graves hacia personalidades como las de Francisco Camps, Carlos Fabra… Casualidad, no lo creo el hecho de que la tarea de enjuiciar a los diferente difamadores que comentaremos posteriormente, esté al mando de la misma jueza la cual archivó la primera denuncia del señor Reinaldo, el siguiente protagonista:
Mucha gente será conocedora de lo siguiente, pero otra mucha no. Es esencial saber los
inicios de esta realidad imaginaria y cómo comenzó a edificarse. Quién tiró la piedra
tiene nombre y apellidos, y precisamente nunca escondió la mano, éste es el peculiar peluquero Reinaldo Colás, con su máxima de defender a muerte a sus dos hijas calificadas por él como víctimas de pederastía, dónde el presunto violador según él fue Giuseppe Farina, expresiente del AC Milan, hombre también con el que se encontraba su exmujer. Con la ayuda de foros de la comunidad y TV3, la creación de R.Colás (peluquero alcohólico) empezó a coger envergadura.
Gracias a las maquinaciones insidiosas que Reinaldo provocó en sus hijas obligándoles que dijeran con máximo ánimo de engaño posible, para poner en entredicho la reputación del expresidente del AC Milan, sin duda alguna, fueron las pioneras en este caso.
Cuando la cosa no estaba para más locos, apareció el más loco de todos. Si tu gran fama
lo es por ser un charlatán, dése por aludido, éste era el señor Toscano el cual creyó la
paranoia R.Colás , y ayudó a crear una gran sopa con un gran caldo, es decir, las circunstancias para cultivar un bulo eran más que favorables, Valencia en sus años 90”se resumía en la ruta del Bakalao, las sectas satánicas y juegos de rol que acababan en asesinatos.
Por lo tanto, qué mejor manera de embaucar a la gente que grabar un documental en el que apareciesen testimonios estimando sus pretensiones. En adición, claro el nivel de facilidad para reclutar “yonkis”, es decir, pagárles para que mientan y conseguir así su cometido. Qué gran casualidad que los partícipes del documental sean un colectivo repleto de trastornos mentales y graves problemas de drogadicción. No se entiende como a día de hoy la comunidad de Youtube no ha eliminado el video, se puede encontrar si busca Caso Bar España en Yt.
También cabe señalar que la juez encargada del desenlace del caso, estuviese también dentro de ese saco de personas presuntamente involucradas, puesto que en el documental se mencionan a los diferentes jueces y políticos según los testimonios involucrados. El tema está en que: ¿Hasta qué punto se le da credibilidad a un toxicómano?
Nos remontamos al 2005, año en el cual el expediente del caso llegó a la justicia, la cual no tardó en señalar que al no encontrar resto alguno de cuerpos y ninguna familia reclamase algún hijo/a suyo, no había nada punible, no se encontraron conductas constitutivas de delito. Pero un caso como éste, en las novelas negras jamás acabaría aquí, tal fue la cosa que cantidad de divulgadores, conocidos actualmente como internautas, empezaron a hacerse eco y decidieron recopilar todos y cada uno de los detalles de esta macabra historia y compartirlos en la nube. El objetivo de volver a viralizar el caso fue conseguido, pero estos preudoinvestigadores, declarados así por la justicia, fueron multados con cantidades de hasta 40.000 euros.
Finalmente, como última pero no por ello menos importante bala contra los jueces y políticos, el director catalán, Valentí Figueres, el cual un guión que realizó antes del caso Bar España , le llevó hacia éste mismo. Su curiosa mente de cineasta le llevó a rodar un documental llamada la “Manada”, con el mismo propósito que el señor Toscano junto Reinaldo Colás. Fue a distintas entrevistas en las que su pretensión era inequívoca, quería remarcar la idea de que en España no se deja investigar este tipo de casos, también señaló que el documental se estrenaría unos meses más tarde.
Adivinen…Nunca se estrenó el documental. Después de llegar más lejos de lo imaginado, los argumentos de la parte demandante se quedaban sin fuerza, dónde probablemente lo único verdad de todo esta “patraña”, era el hecho de que en el bar de la localidad de Benicarló, únicamente se trapicheaba con cocaína y poco más…
A día de hoy, el caso , después de varios finales, llega al último final de todos ellos en el que no se enjuiciará a ninguno de los daños colaterales de la edificación de la mentira más verdad de la historia reciente de este país.
Poseo una cuenta sobre derecho (lacasadelaley)
Actualmente en 3er año grade de
derecho
Me gusta opinar sobre cosas actuales y sobretodo variadas